Antonio M.ª Esquivel PINTURA Una lectura de Zorrilla en el estudio de Esquivel

La réplica del Museo de los Pasillos junto al retrato de Bécquer



1846. Óleo sobre lienzo, 144 x 217 cm. 
El original del Museo del Prado.
El cuadro más famoso de Esquivel y pieza capital del Romanticismo español. Considerado como máximo testimonio gráfico del ambiente intelectual bajo el reinado de Isabel II (1830-1904), este lienzo reúne de forma ficticia a las personalidades culturales más relevantes contemporáneas a Esquivel. En su composición se aúna la complejidad del retrato colectivo junto al esquema de gabinete del barroco flamenco, al detenerse en cada detalle del taller del pintor, pudiéndose identificar y analizar las obras y gustos del artista.


BIOGRAFÍA:

Antonio María Esquivel y Suárez de Urbina, 

Sevilla, 8.3.1806 - Madrid, 9.4.1857

Comenzó sus estudios en la Academia de Bellas Artes de Sevilla. Tras alcanzar cierta fama y prestigio en su ciudad, fue pensionado en 1831 por el cónsul y coleccionista Mr. Williams para proseguir su formación en Madrid, donde al año siguiente concursó en la Academia de San Fernando, siendo nombrado entonces académico de mérito. En contacto con la intelectualidad madrileña de esos años, participó activamente en la fundación en 1837 del Liceo Artístico y Literario, donde daría clases de Anatomía, asignatura que impartiría más tarde en la Academia de San Fernando.

Vuelto a Sevilla en 1838, al año siguiente sufrió una enfermedad que le dejó prácticamente ciego, recibiendo entonces el apoyo de sus compañeros y amigos, movilizados generosamente a través del Liceo para ayudar al artista. Se celebraron actos y funciones para recaudar fondos que sostuvieran la precaria situación del pintor. En 1840 recuperó la vista, pintando entonces el monumental lienzo 'La caída de Luzbel', regalado como agradecimiento al Liceo Artístico por su ayuda (hoy en el Prado, nº 7569). A partir de este momento se le reconoce oficialmente con la concesión de la placa del Sitio de Cádiz y la Cruz de Comendador de la Orden de Isabel la Católica. En 1843 es nombrado Pintor de Cámara y en 1847 académico de San Fernando, siendo además miembro fundador de la Sociedad Protectora de Bellas Artes. Falleció en 1857 (Díez, J. L., Artistas pintados. Retratos de pintores y escultores del siglo XIX en el Museo del Prado, 1997, pág. 82).

Autorretrato de Esquivel.


Recibió su primera formación en la Academia sevillana junto a Francisco Gutiérrez y su protector, el dorador Francisco de Ojeda. Interrumpió el estudio de las Bellas Artes en 1823 ante la invasión de los Cien Mil Hijos de San Luis, y se alistó en las filas liberales para defender la plaza de Cádiz.

Terminada la contienda, volvió a Sevilla y comenzó a pintar. En 1831, pensionado por el cónsul inglés Williams Clarck, prosiguió su formación en Madrid, presentándose al año siguiente al concurso general de la Academia que le nombró académico de mérito. Frecuentó las tertulias literarias madrileñas, colaboró en los periódicos El Siglo XIX y El Panorama, participó en las exposiciones de la Academia de 1835, 1837 y 1838, y apoyó y trabajó en la fundación del Liceo Artístico y Literario el año 1837, institución en la que dio clases de Anatomía, asignatura que más tarde también impartió en la Academia de San Fernando.



En 1839 una enfermedad le privó de la vista. Recuperado a finales de 1840, participó en todos los acontecimientos artísticos madrileños. Recibió la placa del Sitio de Cádiz, la Cruz de Isabel la Católica, fue nombrado pintor de cámara en 1843, académico de número en 1847 y fue miembro fundador de la Sociedad Protectora de las Bellas Artes. En 1848 escribió el Tratado de anatomía pictórica, cuyo manuscrito se guarda en la Biblioteca del Museo del Prado. Participó en la primera Exposición Nacional celebrada en 1856. Murió en Madrid el 9 de abril de 1857


PERSONAJES REPRESENTADOS EN EL CUADRO
De izquierda a derecha, pueden identificarse los siguientes personajes: Antonio Ferrer del Río (1814-1872), Juan Eugenio Hartzenbusch (1806-1880), Juan Nicasio Gallego (1777-1853), Antonio Gil y Zárate (1793-1861), Tomás Rodríguez Rubí (1817-1890), Isidoro Gil y Baus (1814-1866), Cayetano Rosell y López (1817-1883), Antonio Flores (1818-1866), Manuel Bretón de los Herreros (1796-1873), Francisco González Elipe, Patricio de la Escosura (1807-1878), José María Queipo de Llano, conde de Toreno (1786-1843), Antonio Ros de Olano (1808-1887), Joaquín Francisco Pacheco (1808-1865), Mariano Roca de Togores (1812-1889), Juan González de la Pezuela (1809-1906), Ángel de Saavedra, duque de Rivas (1791-1865), Gabino Tejado (1819-1891), Javier de Burgos (1778-1848), José Amador de los Ríos (1818-1878), Francisco Martínez de la Rosa (1787-1862), Carlos Doncel, José Zorrilla (1817-1893), José Güell y Renté (1818-1884), José Fernández de la Vega, Ventura de la Vega (1807-1865), Luis de Olona (1823-1863), Antonio María Esquivel, Julián Romea (1813-1868), Manuel José Quintana (1772-1857), José de Espronceda (1808-1842), José María Díaz (1888), Ramón de Campoamor (1817-1901), Manuel Cañete (1822-1891), Pedro de Madrazo y Kuntz (1816-1898), Aureliano Fernández Guerra (1816-1891), Ramón de Mesonero Romanos (1803-1882), Cándido Nocedal (1821-1885), Gregorio Romero Larrañaga (1814-1872), Bernardino Fernández de Velasco y Pimentel, duque de Frías (1873-1851), Eusebio Asquerino (h.1822-1892), Manuel Juan Diana (1814-1881), Agustín Durán (1793-1862).


El espacio elegido para la representación es el propio estudio del pintor y, entre las obras representadas sobre las paredes de la estancia, pueden identificarse cuadros de Esquivel, como La pasiega o Dama desconocida de la antigua colección Lasso de Vega, el boceto del Adán y Eva del Museo de Bellas Artes de Sevilla, el boceto de El Salvador del Museo del Prado (P06017), y de Luis Tristán (1585-1624) el Martirio de San Andrés del Museo de la Habana.

Las firmas de los artistas: